La startup californiana Alef Aeronautics respaldada por SpaceX ha recibido la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA) para probar su vehículo en carretera y en el aire.
El coche volador totalmente eléctrico tiene un precio de 300.000 dólares y ya acepta pedidos anticipados. La startup Alef Aeronautics respaldada por SpaceX se convierte en la primera empresa de la historia autorizada a realizar estas pruebas. La FAA le ha concedido un certificado oficial de aeronavegabilidad especial para el modelo A.
El Consejero Delegado Jim Dukhovny ha declarado: «Nos permite acercarnos más a la posibilidad de ofrecer a la gente un desplazamiento más rápido y respetuoso con el medio ambiente, ahorrando horas a particulares y empresas cada semana. Este es un pequeño paso para los aviones, un paso de gigante para los coches».
Las restricciones de la FAA han limitado el lugar y la finalidad para los que se permite volar al vehículo. La empresa planea que el coche tenga capacidad para circular por la calle y para despegar verticalmente, de modo que pueda encajar en la infraestructura urbana para conducir y para aparcar.
Se espera que el coche pueda transportar hasta a dos personas, con una autonomía de 200 millas en carretera y 110 millas en vuelo. Hasta el momento, 440 personas ya han pagado un depósito para ser los primeros en poseer el vehículo volador. El año pasado, el Consejero Delegado Dukhovny declaró a los medios que el lanzamiento de estos coches voladores llegaría en 2025.
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