El último lanzamiento ‘Cowboy Carter‘ de Beyoncé ha sido el mejor debut de un disco en plataformas digitales de lo que llevamos de año, con más de 76 millones de reproducciones en un día. La artista de Houston (Texas) estrenó hace unos días el segundo acto de del álbum que sacó en 2022, Renaissance y llega casi seis meses después de la conclusión de su exitosa gira del mismo.
Queen B ha querido rendir homenaje a sus raíces texanas con esta nueva entrega que contiene 27 temas en los que mezcla géneros como el pop, rap, trap o electro y en el que se adentra por primera vez en un estilo que tradicionalmente le ha dado la espalda a la comunidad afroamericana. «Este no es un álbum country, es un álbum de Beyoncé», fue lo que dijo la propia cantante sobre su nuevo trabajo.
«Nació de una experiencia que tuve hace años en la que no me sentí bienvenida… y estaba muy claro que no lo era. Pero, a raíz de esa experiencia, profundicé en la historia de la música Country y estudié nuestro rico archivo musical. Me siento bien al ver cómo la música puede unir a tanta gente en todo el mundo, al tiempo que amplifica las voces de algunas de las personas que han dedicado gran parte de su vida a educar sobre nuestra historia musical. Las críticas a las que me enfrenté cuando me introduje en este género me obligaron a superar las limitaciones que me imponían. act ii es el resultado de desafiarme a mí misma, y de tomarme mi tiempo para doblar y mezclar géneros hasta crear este corpus de trabajo», explicó la artista en un post de Instagram sobre el lanzamiento del álbum.
Beyoncé hace un repaso por la historia del country desde el prisma de la cultura afroamericana, sirviendo, a su vez, de escaparate para visibilizar a más artistas negros en la industria mainstream. Con este nuevo proyecto también pretende recordar que este estilo musical procede de los esclavos negros y sus banjos africanos. Ellos crearon el country hasta que llegaron los minstrel, esos shows de hombres blancos donde ridiculizaban a los negros y a sus canciones de las que también se adueñaron.
Este álbum tiene referencias a Linda Martell. Y es que en los créditos de los temas The Linda Martell show y Spaghettii aparece, precisamente, Linda Martell. ¿Y quién es? Ni más ni menos que la primera artista femenina negra que logró éxito comercial dentro del género, en los años 70. Asimismo, encontramos el tema Jolene, una versión de la famosa canción de Dolly Parton, cuya grabación para este disco ya había sido revelada por la propia Parton.
Entre los artistas emergentes que han formado parte de Cowboy Carter, encontramos en BLACKBIIRD a Tanner Adell, Brittney Spencer, Tiera Kennedy y Reyna Roberts. Estas cuatro jóvenes procedentes de Kentucky, Maryland, Alabama y Alaska hacen country han publicado su primer disco entre este año y el anterior. En Spaghetti y Sweet Bucking Honey, está Shaboozey, artista emergente que destaca por su sonido que viaja desde el country folk al hip-hop.
En Protector, Beyoncé colabora con Rumi, la hermana melliza de Sir que dice: «Mom, can I hear the lullaby? Please?«. Para Smoke Hour, Beyoncé emplea la voz de Willie Nelson -onsiderado uno de los representantes del movimiento Outlaw Country– como presentador de radio. En Just For Fun está Willie Jones, considerado el futuro del country. Otra colaboración es II Most Wanted, en la que Beyoncé se asocia con Miley Cyrus y Levii’s Jeans con Post Malone.
Ya está aquí Cécred, la marca de cuidado capilar de Beyoncé.
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