Lo inesperado tiene otro sabor cuando lo vistes bien, suena bien y, además, se sirve en copa. El pasado 8 de mayo, Crodino —el spritz sin alcohol más vibrante del momento— aterrizó en SSSTUFFF con una propuesta que puso patas arriba la rutina: Crodino Sessions, una experiencia que mezcló moda, cultura urbana y buen gusto.
Concebida para quebrar la monotonía de lo predecible y dar la bienvenida a la primavera, esta experiencia reunió a una comunidad vibrante en uno de los espacios más vanguardistas de Barcelona. En SSSTUFFF, cada detalle estaba milimétricamente cuidado: una atmósfera envolvente, música seleccionada con criterio y una energía compartida que convertía lo casual en algo especial.
Olvida todo lo que crees saber sobre los aperitivos y los afterworks. Crodino, con su icónico color amarillo y ese punch cítrico-herbal tan reconocible, convirtió la tienda de SSSTUFFF en una especie de oasis efervescente donde se mezclaban diseñadores emergentes, insiders de la escena creativa, DJs, creadores de contenido y miradas cómplices que compartían algo único y sin precedentes.
Pero… ¿Qué son las Crodino Sessions?
Las Crodino Sessions representan una nueva forma de vivir los momentos especiales. Lejos de los formatos tradicionales, estas sesiones ofrecen experiencias frescas, inesperadas y llenas de estilo para aquellos que buscan disfrutar de la vida a su manera. Una oportunidad para desconectar de lo habitual, descubrir nuevos lugares y conectar con personas que comparten una visión auténtica. Cada Crodino Sessions tiene lugar en espacios inesperados, desde rincones urbanos hasta lugares con alma propia. La música es el hilo conductor, creando el ambiente perfecto para compartir.
Moda, buena música y spritz sin alcohol
El encargado de amplificar la atmósfera fue Gerard Estadella (@icanteachyou), una figura que —desde hace años— entiende el arte de crear ambientes donde lo sonoro, lo visual y lo emocional se entrelazan. Su sesión tejió un hilo invisible entre los primeros brindis de los asistentes que disfrutaban de un Crodino Spritz bien frío —el perfecto equilibrio de frescura, burbujas y ese sabor cítrico especiado tan característico—.
Allí se reunieron algunas de las voces más resonantes de la nueva escena creativa barcelonesa —@laurabrunet, @paulasumasi, @santifoods, @paulabrookie, @mariaamarti_, @saraemdi o @mariavallespi, entre otros—, todos ellos portadores de un lenguaje propio, de una sensibilidad que se expresa tanto en un gesto como en un look, en una playlist como en una conversación.
La última Crodino Sessions
La última Crodino Session tuvo lugar el 13 de mayo en Frida’s, un espacio igualmente cargado de simbolismo, de alma y de promesas estéticas. Allí, nuevamente, se evocó esa coreografía entre forma y fondo, entre sabor y emoción. Una nueva ocasión para confirmar que lo inesperado —cuando es real— no necesita altavoces. Solo necesita ser vivido.
Crodino, el Spritz sin alcohol
Lo que hace único a Crodino es su icónico color amarillo y su sabor agridulce, intenso y sofisticado, que es el resultado de una fusión de ingredientes de alta calidad como nuez moscada, cilantro, clavo y cardamomo, que se maceran cuidadosamente durante seis meses para liberar todo su potencial aromático. Un proceso artesanal que se percibe en cada sorbo.
La experiencia Crodino se sirve en una copa de vino amplia, con hielo en abundancia y una rodaja de naranja que va siempre dentro de la copa —sin pajita—. El resultado es un trago ultra refrescante que despierta los sentidos con una explosión de sabores especiados y exóticos. Ideal para esos momentos en los que menos es más.
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