Las aguas del Mediterráneo y las del Caribe se mezclan en una colección cápsula que habla de libertad, conexión fluidez.
Con Lisi Herrebrugh, Rushemy Botter y el equipo creativo de Desigual a la cabeza, surge un ejercicio de exploración estética y cultural donde el océano sirve como metáfora de unión y movimiento constante. Cada prenda encarna esa idea de lo líquido: diseños que se expanden, con capas que se superponen y siluetas que rehúyen lo estático.
La colección propone también un nuevo lenguaje que apuesta por la recreación: patchwork multicolor, costuras visibles, texturas inacabadas… Todo rinde homenaje al Arte Popera, recordando que la imperfección también puede ser bella.
Las olas, las corrientes y lo sumergido inspiran tanto las formas como los estampados, y el enfoque High Tides es radicalmente genderless. Son piezas pensadas para ser combinadas, desmontadas y reinterprétalas por quien las lleve. Todo ello en tejidos reciclados, plásticos reutilizados y materiales certificados que refuerzan la idea de una moda más ética y responsable.
El azul -tan característico de BOTTER– se convierte en el protagonista absoluto. Aparece en múltiples intensidades y se apodera de estampados que capturan momentos de transición: una ola rompiendo, una sombra en movimiento, un salto detenido en el aire…
High Tides ya está disponible en exclusiva para los miembros del Desigual Club, y llegará a las tiendas físicas y a la web el próximo 28 de agosto.
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