Blue Monday: el día más triste del año

Hoy, 20 de enero, el calendario nos marca un día que no es solo un lunes cualquiera. Es Blue Monday, la fecha en la que el universo parece conspirar para sumergirnos en un bajón colectivo. Aquel día del año que, según la ciencia, está diseñado para hacernos sentir como si todo lo que hemos construido y planeado para el nuevo año se viniera abajo. Pero tranquilo, porque no estás solo en este viaje hacia la melancolía.

Este fenómeno, que lleva casi dos décadas causando sensación, tiene su origen en un estudio psicológico liderado por Cliff Arnall, quien en 2005 determinó, mediante una fórmula matemática, que el tercer lunes de enero es el día más triste del año. No es casualidad: a este día le suman una combinación perfecta de factores que nos arrastran a un estado emocional bajo.

¿Por qué hoy es tan complicado?

Imagina todo lo que has vivido desde la última vez que te sentaste a hacer balance de tu vida. Primero, la presión de las deudas acumuladas durante las fiestas, esa sensación de haber gastado más de lo que querías, esos regalos que ya no sabes si valen lo que costaron. Luego, la incomodidad de llegar a enero y ver que aún no has cobrado ese salario que te prometieron para este mes. A eso súmale el frío que penetra hasta los huesos, el gris que se apodera del cielo y esa sensación de distancia infinita entre tú y las navidades que parecen haber quedado en otra vida. Pero lo peor de todo: el peso de los propósitos de año nuevo que, en lugar de motivarte, parecen colgar sobre ti como una losa imposible de levantar.

Es un cóctel emocional que te consume, te apaga y te deja con ganas de simplemente quedarte en cama, desconectado de todo. Pero ojo, no te dejes atrapar. El Blue Monday es solo una etiqueta. Y si bien la ciencia nos dice que hoy estamos más bajos que nunca, también nos da la oportunidad de tomar las riendas de cómo enfrentarlo.

¿Qué hacer con este día cargado de energía negativa?

Es importante recordar que el Blue Monday es, en su mayoría, un fenómeno construido a partir de la psicología popular y la mercadotecnia. Las emociones negativas no dependen de un solo día del año, sino de un cúmulo de factores que pueden ser gestionados con herramientas adecuadas. Entonces, en lugar de sucumbir a la idea de un «día más triste», opta por convertir el Blue Monday en una oportunidad para hacer cambios pequeños pero significativos en tu vida.

Este día cargado de energía negativa también puede ser el espacio ideal para reconocer nuestras emociones, darnos un respiro y, sobre todo, recordarnos que los días grises no duran para siempre y que a veces, son necesarios. En última instancia, la clave está en no esperar que un calendario determine nuestro estado de ánimo, sino en buscar las formas de recuperar el control y llenar nuestros días de intenciones positivas y conscientes. Aquí tienes algunas estrategias para transformar este día gris en una oportunidad de crecimiento personal:

Revisa tus metas de Año Nuevo: Si tus propósitos parecen estar lejos de cumplirse, es el momento ideal para reorientarlos o adaptarlos. En lugar de verlos como un peso, haz que se conviertan en pequeños logros alcanzables.

Reconoce tu estado emocional: Aceptar que estás sintiendo tristeza o ansiedad es el primer paso para poder gestionarlo. No hay que negar ni rechazar lo que se siente, sino observarlo sin juicio.

Haz ejercicio: La actividad física es uno de los remedios más efectivos para mejorar el estado de ánimo. Ya sea una caminata por el parque o una rutina en casa, el ejercicio genera endorfinas, los neurotransmisores responsables del bienestar.

Conéctate con otros: Las relaciones sociales son fundamentales en el bienestar emocional. Llamar a un amigo, tener una conversación profunda o compartir tiempo con seres queridos puede ser un buen antídoto contra el aislamiento que puede generar el invierno.

Desconecta de lo negativo: Si las noticias o las redes sociales te están sobrecargando, intenta hacer una pausa. A veces, el bombardeo de información negativa amplifica la ansiedad y las emociones desagradables.

Haz algo creativo: El arte, la escritura, la música o cualquier otra actividad creativa no solo distraen, sino que también pueden ayudarte a liberar emociones reprimidas y encontrar un poco de luz en medio de la oscuridad.

Cómo sobrevivir al vacío existencial que nos deja el fin del verano.