La noche de la Met Gala muchas miradas estaban puestas en dos personas que habían confirmado su asistencia: Kendall Jenner y Bad Bunny. Las idas y venidas de su relación, desde que rompiesen en diciembre del año pasado, hacían su aparición en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York mucho más atractiva para los amantes del cotilleo que la otra expareja que llegaría: Rosalía y Rauw Alejandro.
Si bien en la alfombra roja no vimos ningún acercamiento entre Kendall Jenner y Bad Bunny, sí lo hicieron en el after party. Una vez se habían cambiado de ropa —casualmente en el mismo hotel—, la pareja fue fotografiada sentada uno al lado del otro, con gestos de complicidad, risas y una bebida en la mano por lo que se intuía que, al menos, habían terminado en buenos términos y que permanecía la amistad.
Pero las alarmas han saltado con las últimas fotos. En ellas se ve cómo la it-girl y el cantante han abandonado el Greenwich Hotel de la Gran Manzana por la mañana, por separado, pero con menos de una hora de diferencia. Además, llegaron juntos al hotel esa misma noche, uno detrás del otro. Ambos parecían querer salir sin ser reconocibles: Kendall llevaba gafas de sol, mientras que Bad Bunny llevaba gorra y capucha.
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