¿Están Luca Marchetti y Jordan Bowen abandonando el lado oscuro de la fuerza? ¿O solo volviéndose unos románticos? El dúo londinense regresa a Milán para presentar su colección Spring/Summer 2025, explorando la yuxtaposición entre la belleza de una bailarina o una rosa, y el mundo descarnado que las rodea.
Esta visión se traduce en la colección a través de la transformación de elementos clásicos del ballet y el punk. Las espinas de las rosas se convierten en las puntas afiladas de los Liberty Spikes, y el tutú de una bailarina se reinventa en las mangas abullonadas de un vestido de noche. JordanLuca inmortaliza momentos efímeros recubriéndolos de plástico o láminas de metal, como la rosa de los bolsillos en las blazers, fundida en resina impresa en 3D para que el amor sea eterno; los conserva en una cápsula del tiempo, con la esperanza de tenerlos para siempre.
Una historia de contradicciones se despliega: la idea del tutú de la bailarina es devastada en negro. Los sentimientos del lujo están fragmentados. Las mezclas de seda se recubren de plástico, al igual que las piezas de mezclilla, sastrería y ropa exterior distintivas. La paradoja del tweed japonés es el boleto del hombre para pavonearse; chaquetas cortas, cuadradas, con hombreras y botones de metal con efecto antiguo y destellos de brillo ofrecen esperanza, mientras que en otros lugares la funcionalidad con cremalleras es pragmática.
La colección desafía las normas tradicionales de la moda masculina con un toque sofisticado, juntando en la misma cápsula del tiempo, de color blanco nuclear, a delicadas bailarinas y punkies, vistiendo un conjunto de prendas con un refinamiento que se siente como un soplo de aire fresco en el imaginario de JordanLuca. En él, la conversación sobre los roles de género es una parte imprescindible. «¿Qué significan hipermasculinidad e hiperfeminidad?», se pregunta Marchetti en backstage. Para ellos, jugar con el género es importante.
JordanLuca, que empezó siendo una marca masculina en su totalidad, cada temporada introduce más ropa de mujer. Ahora, representa el 50% de la marca. Este crecimiento ha permitido a JordanLuca jugar con binarios extremos y amplificar su mensaje, explorando estos conceptos a través de su moda binaria y extrema, pero deconstruida. Las botas de tacón kitten se ven a los hombres, la opulenta seda de los looks de mujer contrasta con la lycra de los leggins que abrazan los muslos de hombres y mujeres sujetando el bolso Gotham, confeccionada con pieles italianas y terminado con los característicos herrajes en forma de pincho. Esta temporada aparece en versión mini y ya disponible para su compra.
JordanLuca fusionó sin esfuerzo dos mundos aparentemente separados en una narración cruda y envasada, sin sentimiento, pero dejando saborear por un momento, la belleza efímera y las contradicciones de un mundo que baila entre el romanticismo punk y un deseo eterno de permanecer intacto.
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