La aclamada película «Barbie» dirigida por Greta Gerwig llega a los cines hoy, 20 de julio, prometiendo ofrecer una perspectiva innovadora sobre la icónica muñeca y explorar su enorme influencia en la cultura popular a lo largo de varias décadas. Protagonizada por Margot Robbie, la película ha generado gran expectación y curiosidad, no solo por su elenco y propuesta visual única, sino también por su enfoque en redimensionar la figura de una de las muñecas más famosas de la historia.
Barbie ha sido objeto de diversas interpretaciones, controversias y polémicas a lo largo del tiempo. La historia de la muñeca se remonta a finales de los años 50, cuando Ruth Handler, cofundadora de la compañía Mattel junto con su esposo Elliot Handler, observó a su hija Barbara jugar con muñecas de papel recortables y notó que le gustaba imaginar distintos roles y situaciones para ellas.
En la década de 1950, los juguetes para niñas se centraban principalmente en bebés y objetos domésticos a escala, como cocinas, juegos de té y mesas de servicio. Sin embargo, Ruth Handler tenía la visión de crear un juguete que trascendiera esos roles tradicionales y ofreciera a las niñas una nueva y poderosa forma de jugar. Introdujo entonces un concepto revolucionario: un personaje con un universo propio, que incluía no solo su figura, sino también una amplia gama de accesorios como ropa, autos y una casa. Esta audaz perspectiva sorprendió e incluso inquietó a los inversores y a la junta directiva de Mattel.
Durante un viaje a Suiza en 1956, la diseñadora tuvo la inspiración de un juguete con cuerpo femenino al conocer a la muñeca Bild Lilli, basada en un personaje de dibujos animados del periódico alemán Bild. Era un objeto de colección y distaba mucho del mundo infantil estadounidense; tenía una clara intención sexual, con un traje de baño ajustado, maquillaje y zapatos altos, siendo la antítesis de los inocentes juguetes norteamericanos. Fue esta revelación la que convenció a Ruth Handler de que una versión adaptada para el mercado local sería un rotundo éxito.
En 1959, Mattel presentó la muñeca Barbie, nombrada en honor a la hija de Ruth, Barbara, y su debut fue en la Feria Internacional del Juguete de Nueva York. Sin embargo, ninguna marca estadounidense se atrevió a invertir en ella, ya que la muñeca tenía un aspecto adolescente y no promovía los valores tradicionales del hogar. Mattel decidió entonces emprender una gran campaña publicitaria y vender directamente el producto a las tiendas. Un año después, Barbie y todo su universo relacionado batían récords de ventas, recuperando la inversión de un millón de dólares en el primer mes de comercialización.
A pesar de las polémicas inevitables que ha enfrentado desde su creación, Barbie sigue siendo un símbolo del poder femenino y de grandes aspiraciones. Su legado perdura, y la película de Greta Gerwig parece demostrar toda la importancia que esta muñeca icónica ha tenido en la cultura popular.
Barbie y la moda: una unión icónica que ha perdurado a lo largo de los años.
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