Quizás es lo que necesitan los Ginch de la Navidad en estos días: alegrarse la vida con destellos de color, autorregalándose (o esperando recibir) relojes que aviven su muñeca. ¿Quién dijo que la alta relojería, tan tradicional ella, tenía que ser aburrida? La euforia cromática ha llegado a un sinfín de marcas, como prueban estos cinco modelos que se alejan de convencionalismos y que (avisamos) no son aptos para todos los bolsillos.
Big Bang Meca-10 Street Art de Hublot
Difícilmente encontrarás en el mercado un reloj más pigmentado que éste. Parte de una base neutra y sin pulir, pues su caja de 44 mm de diámetro está fabricada con un sorprendente compuesto de hormigón, mezclado con una resina epoxi para garantizar su solidez. También utiliza graneo, hecho a base de carbono. Sobre ese lienzo, el grafitero suizo Saiff Vasarhelyi ha plasmado un estampado con aerógrafo. El movimiento mecánico de cuerda manual que alberga ofrece una extensísima reserva de marcha de unas 240 horas. Lo malo es que solo se vende en Estados Unidos.
PVP.: 49.500€
Oyster Perpetual 36 de Rolex
La firma de la corona ha optado en los últimos tiempos por transmitir diversión a través de las esferas de algunos de sus Oyster Perpetual, la colección de entrada al universo Rolex. Este año ha salpicado su ejemplar azul turquesa de burbujas de distintos tamaños y tonos (lo que en la casa llaman el motivo Celebration), convirtiendo esta versión en acero en un cuadro pop. Disponible en 31, 36 y 41 mm, incorpora un calibre automático con una autonomía de 70 horas, aproximadamente.
PVP.: 6.100€
DEFY 21 Chroma II de Zenith
La caja de cerámica negra de 44 mm de este cronógrafo muestra una oscuridad total, pero los tonos del arcoíris están presentes en multitud de detalles: en los pespuntes de la correa de caucho, en la corona, en el indicador de la reserva de marcha, en los índices, en los números de la escala de centésimas de segundo… Hasta en el movimiento, visible a través de la esfera esqueletizada. Sus puentes lucen un revestimiento en PVD de colores, y la masa oscilante es azul.
PVP.: 16.800€
RM 07-01 Automatic Coloured Ceramics de Richard Mille
Richard Mille nos tiene acostumbrados a sus explosiones de color y a la mezcla de tonos imposibles. Los contrastes que consigue con el uso de la cerámica teñida se han llevado de nuevo a este RM 07-01 Powder Blue, cuya estética se inspira en el estilo Memphis, una tendencia de diseño de los años ochenta que combinaba colores, estampados y figuras geométricas. En su esfera de oro rojo tratado con PVD gris se han colocado elementos acabados con grabado guilloché y hay otros de cerámica coloreada, apliques de caucho cortados con láser y piezas engastadas con diamantes.
PVP.: 185.900€ aprox. + impuestos
Vanguard Color Dreams Loes Van Delft Limited Edition de Franck Muller
Es difícil no sonreír viendo la esfera de este reloj automático que revela el universo propio de la artista holandesa Loes Van Delft, con su personaje Pjipje dibujado en 26 colores, transferidos uno a uno. Con una caja de tipo tonel realizada en titanio con tratamiento PVD negro y correa integrada, es capaz de alegrar al más cenizo. Se vende junto a una impresión artística de 90 x 90 cm firmada por la artista.
PVP.: No disponible
Texto de Ana Franco
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