Marine Serre nos lleva fuera de París para adentrarnos de lleno en un ecenario apocalíptico post-atómico.
Una cueva para protegerse de la radiación. Un lugar oscuro donde los supervivientes de la crisis ecológica y los desastres climáticos han construido sus comunidades.
Criaturas mutantes desfilan vestidas con ropas brutales que mezclan los tejidos propios de las empresas espaciales, abrigos destinados a misiones imposibles, uniformes fluorescentes y ponchos hechos con restos de mantas. Todos impresos, como ya es habitual, en la media luna de la marca, que sigue creciendo y encontrando asiduos en el sistema de la moda.
Una nueva apuesta del FutureWear de Serre que consolida su saber hacer. Ganadora de LVMH en 2017 es el claro ejemplo de lo que significa ganar este premio que acaba de desvelar los finalistas.
Marine Serre FW19
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