Los desfiles de moda, especialmente los de marcas multimillonarias, tienen el poder transformar cualquier escenario y trasladarnos a un lugar mágico por unos instantes. A veces, el exceso de producción hace que las propias prendas queden deslucidas. Pero este no ha sido el caso. Anoche, la marca estadounidense convirtió un antiguo banco en un lujoso club Art Deco.
Bienvenidos a “Ralph’s Club”: el establecimiento que abrió solo por una noche. Tras casi un mes de obras, transformaron un banco vacío en Wall Street en un exclusivo club nocturno de jazz donde Ralph Lauren (@ralphlauren) presentó su colección de otoño.
Los tops de noche con babero blanco y hombros descubiertos tuvieron gran protagonismo, así como las espaldas recortadas y los escotes en V muy pronunciados. Sin embargo, la prenda estrella fue el esmoquin. También hubo un montón de satén negro por todas partes. La mayoría de las modelos lucieron chaquetas masculinas de doble botonadura en satén de colores primarios sobre pantalones negros clásicos y camisas blancas. Otras llevaron versiones más cortas y ajustadas en terciopelo.
A mitad del desfile, los esmóquines dieron paso a vestidos propios de una alfombra roja. Siguiendo con la gama cromática anterior, los vestidos con drapeados estratégicamente colocados y los diseños satinados estuvieron presentes en blanco y negro y toques de color en rojo y azul klein. Aunque, si tuviéramos que quedarnos con un look, nos quedamos con el vestido rojo que lució Bella (@bellahadid) y que se encargó de romper la monotonía del blanco y negro.
En definitiva, tal y como afirmó el propio Ralph Lauren, Fall 2019 celebra ese estilo atemporal para la mujer moderna, independiente y contemporánea.
Sigue toda la información de HIGHXTAR desde Facebook, Twitter o Instagram
Podría interesarte…