Para los que puedan sumergirse en unos atípicos días calurosos en Londres, ya existe una nueva forma de goce y disfrute sobre el agua. La primera “piscina en el cielo” del mundo situada a 115 pies de altura ya existe, y está en el barrio de Nine Elms.
Los planes para esta piscina de vanguardia ya empezaron a brotar en 2013, antes de que se desarrollasen los materiales y se enviaran desde Colorado. Su estructura transparente se encuentra suspendida entre los 10 pisos de dos bloques de lujo, colindantes a la embajada de Estados Unidos.
La sky pool, de 25 metros de largo, tiene capacidad para 400 toneladas de agua, pero sólo tiene 5 metros de ancho y 3 de profundidad. Con motivo de dicha instalación acuática privilegiada, los precios de los pisos se han elevado a precios desorbitados con apartamentos de dos dormitorios a 600.000 libras como mínimo. Otros superan la barrera del millón de libras.
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