La espera ha sido casi de tres años desde que la artista lanzara Calambre, pero ha merecido la pena: el nuevo álbum cuenta con 16 canciones con una narrativa propia. La publicación de Grasa ha llegado acompañada de un vídeo temático para cada canción, lo que hace de este proyecto el más teatral de la artista hasta la fecha.
En lo que respecta a su estilo, Nathy Peluso no pierde su identidad del rap latino, pero en este nuevo álbum de estudio se ha inspirado en sonidos de los 2000 propios de artistas como Kanye West. En las letras la argentina continúa con su poder y autoridad haciendoreferencia sus detractores y a los obstáculos que debe superar cada día.
En el álbum se pueden encontrar colaboraciones tan destacadas como la de Duki en Manhattan y con un skit de C. Tangana en No les creo nada. Además, la argentina canta con otros artistas tan diversos como Blood Orange en El día que perdí mi juventud, en Menina con Lua de Santana y con Paco Amoroso & Ca7riel en Todo roto.
GRASA revela a una Nathy más madura y valiente, navegando sin problemas por el rap, las baladas y los géneros tropicales. Por primera vez, muestra su lado más íntimo y personal, sin miedo a hablar abiertamente sobre el dolor, el crecimiento personal y las crisis creativas que acompañan la fama, el éxito y las presiones del estrellato.
En español, GRASA evoca muchos significados, especialmente en su Argentina natal, donde la palabra puede significar “hortera”, “insípida” o “vulgar”. Pero Nathy, al igual que su música, no quiere limitarse a una definición: podría ser cómo hacer alarde de su cuerpo que no encaja con las expectativas heteronormativas o podría evocar la riqueza de sus arreglos musicales, o incluso su actitud entusiasta.
Nathy coprodujo y coescribió las 15 pistas del álbum. La mayoría de los temas son resultado de una estrecha colaboración con el músico y productor venezolano Manuel Lara ( Kali Uchis, Bad Bunny. GRASA se inspira visual y estilísticamente en la grandeza cinematográfica de la historia de la mafia, la salsa neoyorquina de los años 70, iconos actuales como Kendrick Lamar, pero se basa en un sonido contemporáneo.
Nathy Peluso y Desigual han cocreado una serie de prendas y accesorios que ven finalmente la luz.
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