Melissa y Diesel se alían en una colaboración que trasciende lo meramente estético para explorar los límites del diseño, la materia y la identidad. En esta entrega, ambas firmas reimaginan la icónica letra “D” de Diesel como una serie de siluetas cuánticas, que funcionan como artefactos visuales y objetos de deseo contemporáneo. La propuesta se materializa en tres formatos: una chancla, una plataforma y una zapatilla.
Como ya es costumbre en las creaciones de Melissa, las piezas están elaboradas a mano a partir de Melflex™, el material patentado por la marca brasileña. Pero aquí, el Melflex se convierte en algo más que un soporte: se transforma en lenguaje plástico, en superficie moldeada por tecnologías avanzadas y una dirección creativa que bebe del arte óptico, las geometrías líquidas y las estructuras industriales.
La colección Quantum —nombre que remite al campo de la física, pero también a la idea de lo inasible, lo cambiante— se presenta como una cápsula visualmente poderosa. El modelo Quantum Thong, una reinterpretación de la clásica tanga de playa, se ofrece en azul transparente, rojo brillante, negro profundo y un rosa pálido. Su forma, compacta y continua, remite a una arquitectura blanda y sensorial.
La Quantum Platform toma el formato de una mule de punta abierta y lo lleva al extremo: los colores —rojo, azul eléctrico, negro y azul hielo translúcido— crean un juego cromático que desafía la gravedad visual. Esta plataforma no solo añade altura física, sino también discursiva; es una pieza pensada para la escena urbana pero construida como escultura funcional.
La tercera silueta, la Quantum Sneaker X, se presenta como una zapatilla de punta cerrada, con diseño deformado y estética cyber-fluid. Disponible en verde transparente, rojo magma y negro carbón, esta sneaker es una anomalía intencionada dentro del universo del streetwear: un manifiesto de fluidez estética y corporal.
En cuanto a color, la colección se articula en torno a una paleta que Melissa describe como «sofisticación líquida»: tonalidades que cambian con la luz y que revelan matices ocultos según el movimiento. El resultado son superficies vivas, táctiles, casi biomórficas, que dialogan con el entorno y con quien las porta.
Esta nueva colaboración ya está disponible en los sitios web oficiales de Melissa y Diesel, así como en puntos de venta seleccionados a nivel internacional.
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