El lujo silencioso: los que pueden gastar en tiempos de volatilidad económica

El lujo silencioso se erige como una de las mayores tendencias de 2023. El lujo silencioso es suave y táctil, sobrio y pulido y 100% sin logotipo. 

La categoría del lujo silencioso está gobernada por marcas como The Row, Brunello Cucinelli, Jil Sander o Bottega Veneta. Estas marcas se comercializan y reservan para aquellos que saben, y sus productos básicos atemporales se conocen alternativamente como lujo codificado o silencioso. El logotipo de este tipo de lujo es inexistente, y solo aquellos con un ojo entrenado reconocerán el artículo de prestigio. 

Con el creciente interés por eventos como La Semana de la moda de Copenhague, la tendencia del Quiet Luxury también se está volviendo cada vez más recurrente entre las influs de moda. Las nórdicas son las reinas del minimalismo, convirtiendo cualquier básico en algo extremadamente cool. Y todo el mundo quiere copiar este look. No requiere mucho riesgo estilístico y normalmente suele ser fácil de replicar. Una de las mejores embajadoras de este tipo de vestimenta es Gwyneth Paltrow, 

¿Por que el lujo silencioso se ha hecho tan popular ahora? 

Como la gran mayoría de tendencias, todo forma parte de un ciclo en el que las modas se repiten. De hecho, esta no es la primera vez que el lujo discreto domina la moda, ya se convirtió en una tendencia importante en 2008, en medio de la Gran Recesión, que azotó al panorama mundial.  Ahora, nos encontramos en uno de esos momentos de incertidumbre económica y los nervios están a flor de piel con respecto a los futuros financieros. La gente no quiere demostrar necesariamente que tiene mucho dinero -ostentar- y la que lo tiene invierte en piezas atemporales con un mayor enfoque en la sostenibilidad y el consumismo consciente.

Elegir alejarse de la exageración y la logomania significa buscar consumidores más ricos con un gusto discreto que disimula en parte su poderío. Porque en realidad se necesita mucho más dinero para comprar una prenda donde los materiales y la artesanía priman por encima de la marca. 

Este factor se percibe muy bien en la estructura de precios de cada tipo de producto. Las marcas cobrarán más por productos austeros y menos por piezas que llaman más la atención y que son fácilmente identificables por la mayoría de los mortales. Los productos de marca centrados en el logotipo, fácilmente reconocibles, son para un tipo de cliente que quiere señalar su status. Pero el cliente que no le hace falta demostrar ese status no se rige por un logo sino por el valor intrínseco del producto. Louis Vuitton sin ir más lejos cobra más por bolsos y accesorios sin ninguna marca obvia. Y este patrón se repite en cualquier marca que puedas conocer de la industria. 

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El lujo silencioso pone en valor los materiales de alta calidad, la artesanía y el patrimonio. Rechaza el logo ostentoso y crea un sentido de exclusividad basado en el valor intrínseco del producto en lugar de marcadores externos de riqueza. Dirigirse a la clientela que busca esto requiere comprender más que sus gustos, su estilo de vida.

Si bien la logomanía y el maximalismo de marcas como Gucci o LV dominaba anteriormente los mercados, esta nueva forma de vestir beneficiará a marcas discretas como Brunello Cucinelli o The Row. Al mismo tiempo que para los más adinerados sólo es otra manera más de distinguirse, la tendencia irá descendiendo por la pirámide social hasta convertirse en un secreto a voces.