Moschino se apodera de la Semana de la Moda de Milán con la colección primavera-verano 2024 y un espectáculo de aniversario 40° que rinde homenaje al fundador Franco Moschino y sus alianzas artísticas.
El desfile de Moschino SS24 en Milan Fashion Week fue una celebración del 40 aniversario de la firma y, por ello uno de los shows más únicos y memorables de la temporada. Tras la despedida en 2023 de Jeremy Scott tras una década al frente de la dirección creativa de la casa, la colección fue diseñada por cuatro de los nombres más influyentes en la moda —y amigas de la casa—, Carlyne Cerf de Dudzeele, Gabriella Karefa-Johnson, Lucia Liu y Katie Grand.
Dividida en actos, como una obra teatral, la colección tomó como referencia las colecciones pasadas de la casa, inspirándose así de sus archivos. Durante el desfile vimos pasar los básicos de la marca desde 1960 hasta 1990 con rediseños igual de coloridos y exhuberantes como los de la época. Desde vestidos con lazos y volantes XXL, hasta parches tejidos, encaje y las letras XL, esta fue una colección que celebró la herencia de la firma y su singular sentido del humor.
El desfile empezó con la visión de la estilista Cerf de Dudzeele que homenajeó la atemporalidad del más desenfadado e irónico diseñador del siglo XX, Franco Moschino. Los trajes blancos de doble botonadura se combinaron con pantalones plisados, camisetas de cuello y bolsos XXS en forma de corazón para aportarte un toque divertido. Las siluetas se complementaron con collares y pendientes en formas clásicas, buscando así el fino equilibrio entre lo elegante y lo opulento.
El trabajo de Karefa-Johnson vino después, marcando el comienzo del segundo acto. La estilista había trabajado adaptando las siluetas de Franco para los shows de artistas en los 90. Por eso, se centró en reimaginar los clásicos sombreros de vaquero de Franco, las joyas llamativas y los vestidos de ganchillo para la mujer moderna de la época; y con el tema «PURE/HONEY» de Beyoncé de fondo, la energía excéntrica de KJ penetró en cada uno de los asistentes.
Para el tercer acto, Liu se convirtió en el centro de atención con un enfoque más conceptual al construir nuevos motivos en torno a la icónica camiseta de Franco Moschino «Protect Me from Fashion System». Grand siguió un poco la línea y en el cuarto acto apostó por el uso de eslóganes clave en el imaginario de Franco. Además, también tuvo lugar la coreografía de Wayne McGregor, el director artístico del Studio Wayne McGregor y el coreógrafo residente de The Royal Ballet.
El baile fue seguido por una interpretación de violín de «I Am What I Am» por Laura Marzadori, haciendo referencia al desfile de moda de Otoño/Invierno de 1986 de Moschino. A medida que el instrumento resonaba por toda la sala, el elenco de modelos emergió una vez más, vistiendo camisetas hechas en asociación con la Fundación Elton John para el SIDA, que ahora están disponibles para su compra en el sitio web de la marca y en su tienda insignia de Milán.
Tacones de Flamenco rosa: la caricaturesca creación de Moschino.
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