La dramatización del universo de LOVERBOY y su esencia contracultural vuelven a subirse al escenario de esta nueva propuesta escenificada en torno a una obra de teatro interactiva titulada «EL CURIOSO CASO DE MOSHKIRK Y BOONESS».
Su colección FW24 se presenta como una oda a Moshkrik, Escocia; ‘a los espíritus rebeldes de una subcultura resucitada que vive con fuerza hasta nuestros día, que también habla de lo mágico, de las fábulas y los cuentos; de lo absurdo’.
Todo ese imaginario estimulado por la fantasía y la imaginación se reinterpreta ahora por parte del diseñador escocés, en toda su gloria lúdica, vislumbrando la moda como arte en movimiento, y el punk y la música disco como actos de rebeldía que dominaban las calles antes del reinado conservador de Margaret Tatcher.
En esta obra dramática, las monstruosas criaturas y los rebeldes habitantes de Moshkirk cuentan la historia de su movimiento de moda pionero en 1979 a través de una colección orquestada en torno a 37 looks, confeccionada en base a patrones de rabia y caos, con un gran predominio de la sastrería XXL adornada con paneles de patchwork. Le siguen jerséis de tartán y abrigos de hombros caídos que configuran looks hipnóticos adornados con las orejas de animales representativas de la marca.
Las chaquetas vaqueras decoloradas y los anoraks con animal print acaban de inyectar la rebeldía en la propuesta, mientras que las camisetas de bandas, las prendas de croché deshilachadas y las botas de plátano peladas completan la obra con notas sarcásticas.
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