Esta es la primera vez que la alemana se sube a la pasarela desde que cerró el desfile de primavera 2018 de Versace junto a las icónicas supermodelos de los 90 Carla Bruni, Naomi Campbell, Cindy Crawford y Helena Christensen.
¿Quién sino podría traer de regreso a Claudia Schiffer a la pasarela? Pues sin duda alguna Donatella Versace. La supermodelo mantiene una relación muy estrecha con la directora creativa de la firma y solo vuelve a la pasarela si es con su segunda familia: Versace. No es la primera vez que la modelo nos sorprende tras tantos años sin modelar, pues en 2018 cerró el show SS18 de Versace junto a Carla Bruni, Naomi Campbell, Cindy Crawford y Helena Christensen.
El regreso de Claudia Schiffer a las pasarelas llega perfectamente sincronizado con el resurgimiento cultural de las supermodelos: «Ha sido maravilloso ver que las generaciones más jóvenes adoptan lo que hicimos», explica la it girl a la revista Vogue. «Algo que me encantó de la época fue que, más allá del modelaje y la moda, fuimos capaces de defender la ambición femenina y fuimos símbolos del éxito hecho a sí mismo».
En esta ocasión, Versace decidió volver a sus archivos para SS24, ofreciendo piezas inspiradas en el estilo de la firma en los sesenta. La colección está codificada por Twiggy, ya que los vestidos de línea A y los conjuntos de dos piezas dominaron en la pasarela. Desde los tonos pastel, hasta el pelo estilo bouffant, las faldas acampanadas, los metalizados, las mangas abullonadas y los crochets, Versace SS24 tiene una clara inspiración retro.
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