En HIGHXTAR. nos hemos unido a Lacoste para dar visibilidad a jóvenes talentos de la escena creativa de nuestro país bajo el lema ‘Raise Your Game’, tres palabras que sirven de manifiesto para el lanzamiento de la nueva Game Advance Luxe. Este nuevo modelo del cocodrilo es una versión con volumen de la icónica zapatilla de pista que combina detalles tradicionales con un aire contemporáneo inspirado en el streetwear más OG. La identidad vintage de siempre con un twist actual que mantiene su esencia.
Para ello, hemos seleccionado a cuatro figuras del mundo del arte especializadas en diferentes ámbitos: fotografía, música, ilustración y danza. En esta serie de entrevistas, hablamos con ellos para conocer sus ideas, su trabajo y sus perspectivas de futuro en un panorama que, a pesar de las dificultades, demuestra el potencial de las nuevas generaciones.
Bailarina especializada en hip-hop, Xelyna nos sumerge en el mundo del baile profesional para darnos a conocer los obstáculos, los sueños y los esfuerzos de una joven promesa de la danza.
Highxtar (H) – ¿Cuáles son esos primeros recuerdos con los que descubriste que tu vocación era el baile?
Xelyna (X) – Me di cuenta de que quería ser bailarina mientras estaba haciendo una coreografía con 14 años que me aprendí con 9. Me hizo darme cuenta de cuánto he adorado bailar siempre, ya que así pasaba mi infancia, bailando. Haciendo esa coreografía después de años y sintiéndome tan feliz me di cuenta de que quería dedicarme a la danza.
(H) – Eres miembro de Gkonceptz. ¿Nos cuentas un poco en qué consiste? ¿Estás en algún otro proyecto o grupo?
(X) – Gkonceptz e Illicitz son crews a las que pertenezco. Una crew, básicamente, es tu familia y equipo en el mundo del baile. Como en la mayoría de crews, la gente tanto de Gkonceptz como la de Illicitz compartimos una misma mentalidad a la vez que cada uno de los miembros somos muy diferentes el uno del otro. Gkonceptz es una crew allstyles, por lo que presenta una variedad de movimiento y esencia increíble. Estar dentro de la crew consiste en ayudarnos, inspirarnos y enseñarnos unos a otros, trabajando duro cada uno para motivarnos a subir el nivel siempre y a partir de poder trabajar solos, podemos trabajar juntos. Pero no todo es el baile, dentro de la crew hay gente que lleva más de una década bailando y otra que no llega a media década. Esa diferencia de experiencia y edad hace que en muchos aspectos de la vida, no sólo en el baile, nos podamos guiar entre nosotros. En cuanto a Illicitz, Illicitz es una crew de hip hop creada hace unos pocos meses, pero es un proyecto que tengo desde poco después de empezar a bailar. Somos bailarines de la misma generación que compartimos esa pasión y ese hambre por el hip hop y trabajamos muy duro para mejorar día día y ser un gran apoyo entre nosotros en cada uno de nuestros trayectos.
(H) – Frente a otras artes, hay una concepción generalizada de que el baile requiere mucha disciplina y un gran sacrificio. ¿Cómo ha sido para ti?
(X) – Todo tipo de arte requiere un gran sacrificio, eso es un hecho y el baile claramente no es una excepción. Al empezar, sin darme cuenta, me volví muy disciplinaria en el tema del baile. No podía pasar un día sin que aprendiese algo o sin hacer la rutina de ejercicios que tenía, pero no era porque tuviese que hacerlo, sino porque quería hacerlo, era divertido y me hacía mucha ilusión. La dificultad para mí fue y sigue siendo mantener la disciplina con el paso del tiempo. Cuanto más aprendo y más experiencias vivo en la industria, más difícil es tener esa ilusión del principio y cada vez cuesta más. Pero ahí exactamente es cuando se ve si de verdad quieres bailar o simplemente estás jugando, así que hay que seguir ya que es lo que quiero hacer. A mí me costó mucho empezar a bailar, ya que no me podía permitir tomar clases de baile y cuando tuve oportunidad de empezar mi hermana mayor no lo aceptó e hizo todo lo que pudo para evitar que yo fuese a bailar. Querer bailar me costó la relación con mi hermana y con amistades que tenía antes. Me hizo darme cuenta de que en la vida hay que espabilar, si quieres algo está en ti si lo vas a conseguir o no, y si estás dispuestx a perder gente o cosas que quieres.
(H) – La música urbana ha renacido en los últimos años. ¿Ha sido algo positivo para los bailarines?
(X) – No puedo hablar en nombre de todos los bailarines, ya que siempre hay distintas formas de pensar. Según lo que he visto, hay tanto gente que se adapta a lo nuevo de forma positiva como gente que se encierra en lo que es la vieja escuela o los que se fuerzan a adaptarse a la actualidad. En mi caso es positivo que varíe y cambie con el paso del tiempo, ya que en eso consiste la evolución. Si la música evoluciona el baile evoluciona con ella, y eso hace que crezca la cultura. Yo personalmente disfruto ese contraste de la música old school a la de la actualidad y poder unir lo viejo y lo nuevo.
(H) – ¿Cuál es para ti la clave que diferencia a unx buenx bailarinx?
(X) – Para mí todo se basa en los valores de la persona. En tus valores está la clave. Si tienes humildad, respeto, paciencia, originalidad y realidad (entre otros muchos), para mí eso es lo que te hace convertirte en un buen bailarín, ya que son los mismos valores que te hacen buena persona, y da igual lo bueno que seas como bailarín si no tienes eso como persona. En tus valores está cómo de duro trabajas, cómo de constante serás y el nivel de gratitud que mostrarás con cada fruto de tu trabajo. Tus valores constituyen tu personalidad y eso constituye tu esencia en el baile. Tus valores se reflejarán en tu danza, así que es cuestión de trabajar cuerpo y mente.
(H) – ¿Qué aporta para ti el hip-hop que no encuentres en otros géneros?
(X) – La respuesta que voy a dar a continuación es en base a lo que me transmite emocionalmente el hip hop, ya que al no conocer todos los otros géneros que hay, no puedo compararlo musical o artísticamente. La cultura del hip hop es una locura, el hecho de que se acepte totalmente a todo tipo de persona o de creación me hace tener esperanza en lo que es la sociedad. En el hip hop no te encontrarás con que te nieguen o te critiquen por hacer algo solo por tu color de piel, tus orígenes o tu religión. El hip hop es la unión de todo lo que antes se ha separado y eso era inimaginable para mí lo que lo vuelve precioso a mis ojos. Todos los valores que tengo me los ha dado el hip hop, me abrió los ojos antes de que fuese tarde sobre quién soy en realidad y qué quiero hacer, y estaré eternamente agradecida por que apareciese en mi vida. En resumen, lo que encontré en el hip hop es la respuesta.
(H) – ¿Algún estilo de baile que te apetezca probar en un futuro?
(X) – Actualmente estoy probando todos los estilos que captan mi atención pero seguramente en el futuro encontraré alguno nuevo que llame mi atención.
(H) – ¿Es fácil ser bailarinx en nuestro país? ¿Con qué dificultades te encuentras?
(X) – La elección de ser bailarín en España implica una dificultad increíble. En otros países el salario mínimo de un bailarín es tres veces lo que se paga aquí. En vez de como a artistas nos tienen como a monos de feria. Se basan en que hacemos algo que amamos para no pagarnos y que lo hagamos «por el arte». O tenernos en un rodaje de 12 horas y solo querer pagar 50€ a cada bailarín. Y aquí el verdadero problema somos los bailarines, ya que tanto gente que acaba de empezar como gente que tiene años de experiencia siguen aceptando ese abuso, y así nunca cambiaran las cosas. La gente se piensa que bailar es talento y ya, cuando un bailarín está continuamente entrenando y aprendiendo para estar en su mejor nivel. Otra dificultad para mí es que todo gira en torno al nombre, a los seguidores, a los contactos que tengas y cómo vendes tu baile. Para la mayoría de trabajos de baile como shows, videoclips o conciertos, no buscan el perfil que tengo yo, sino un perfil más comercial, lo que dificulta más las cosas y te hace tener que adaptarte si quieres trabajar. Nos quejamos mucho de cómo nos ve el resto de gente, pero primero hay que solucionar los problemas de la comunidad de bailarines.
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